apreciar cada segundo,
es un acto dificil de dominar,
entender y asumir lo efimero tan efimero que somos,
es algo simple,

pero se te enredan las manos,
y desenredando las agujas y los hilos,
vas raspando, vas desgastando,
vas clavando y destejiendo macrames...

apreciar cada supiro, palabra o desorientación,

porque se te va la vida,
ellas se fueron a otro planeta,
y no es mi perdida,
no es una perdida siquiera,
pero me hace recordar,
afrontar, visualizar,
que la luz se enciende y se apaga sin aviso.

y hay que decir gracias por el destello.